La energía maremotriz es la que resulta de aprovechar las mareas, es decir, la diferencia de altura media de los mares según la posición relativa de la Tierra y la Luna, y que resulta de la atracción gravitatoria de esta última y del Sol sobre las masas de agua de los mares.
La energía de las mareas se transforma en electricidad en las denominadas centrales meremotrices, que funcionan como un embalse tradicional del río. El depósito se llena con la marea y el agua se retiene hasta la bajamar para ser liberada después a través de una red de conductos estrechos, que aumentan la presión, hasta las turbinas que generan la electricidad.
El lugar ideal para instalar una central maremotriz es un estuario, una bahía o una ría donde el agua de mar penetre.
La construcción de una central maremotriz es solo posible en lugares con una diferencia de al menos 5 metros entre la marea alta y la baja.
¿Cómo funciona?
Cuando la marea sube, las compuertas del dique se abren y el agua ingresa en el embalse.
Al llegar el nivel del agua del embalse a su punto máximo se cierran las compuertas.
Durante la bajamar el nivel del mar desciende por debajo del nivel del embalse.
Cuando la diferencia entre el nivel del embalse y del mar alcanza su máxima amplitud, se abren las compuertas dejando pasar el agua por las turbinas.
El agua, al pasar por el canal de carga hacia el mar, acciona la hélice de la turbina y ésta, al girar, mueve un generador que produce electricidad.
Es una de las más antiguas formas de energía. El uso de molinos de marea en las costas españolas, francesas y británicas se remonta al año 787. Consista en un estanque de almacenamiento que se llenaba por la marea a través de una acequia y se vaciaba durante la marea alta a través de una rueda de agua.
Ventajas
- Es una energía renovable
- No contaminante
- Silenciosa
- Bajo costo de materia prima
- No concentra población
- Disponible en cualquier clima y época del año
Desventajas
- Impacto visual y estructural sobre el paisaje costero
- Dependiente de la amplitud de mareas
- Traslado de energía muy costoso
- Efecto negativo sobre la flora y la fauna
Se considera que es una fuente renovable de energía ya que usa la energía del cambio de las mareas en lugar de quemar o consumir cualquier tipo de fuente de energía.
Aunque la tecnología necesaria para aprovechar la energía maremotriz está bien establecida, la energía mareomotriz es cara y sólo hay una estación importante en funcionamiento. Se trata de una estación de 240 megavatios en la boca del estuario del río Rance, en Francia.
La principal ventaja de la energía de las mareas son sus beneficios económicos. La energía mareomotriz no requiere ningún combustible. Las mareas suben y bajan todos los días en un patrón muy consistente.
La tecnología necesaria para convertir la energía mareomotriz en energía eléctrica es muy similar a la tecnología utilizada en las plantas de energía hidroeléctrica, se basa en presas, compuertas y turbinas.
La Rance en Francia
En el estuario del río Rance, EDF instaló una central eléctrica con energía maremotriz. Funciona desde el año 1967, produciendo electricidad para cubrir las necesidades de una ciudad como Rennes (el 9% de las necesidades de Bretaña). El coste del kwh resultó similar o más barato que el de una central eléctrica convencional, sin el coste de emisiones de gases de efecto invernadero a la atmósfera ni consumo de combustibles fósiles ni los riesgos de las centrales nucleares (13 metros de diferencia de marea).
Los problemas medio ambientales fueron bastante graves, como aterramiento del río, cambios de salinidad en el estuario en sus proximidades y cambio del ecosistema antes y después de las instalaciones.
Otros proyectos exactamente iguales, como el de una central mucho mayor prevista en Francia en la zona del Mont Saint Michel, o el de la bahía de Fundy, en Canadá, donde se dan hasta 15 metros de diferencia de marea, o el del estuario del río Severn, en el Reino Unido, entre Gales e Inglaterra, no han llegado a ejecutarse por el riesgo de un fuerte impacto ambiental.